¡New York…New York… entre jabones, arte y delicias!

Si me permitieran escoger un lugar para visitar todos los años sin lugar a dudas ese lugar sería New York City.  Es que allí encuentras tanto de todo!  El simple hecho de poder toparte, en un tramo de menos de 3 millas, con múltiples establecimientos que van desde fábricas de quesos artesanales (1), mercados con sobre 30 variedades de panes frescos (2), las más ricas trufas de chocolate (también las más costosas) del mundo (3), cupcakes diminutos (4), hasta una vitrina de tienda de ropa que incluye un hermoso conejito vivo que a su vez es la mascota del lugar (5).  Imagina que vas caminando y encuentras en una acera a un individuo que vende guiones de películas y series de televisión (6), que cuando miras a un lado puedes ver un mercado de mariscos y peces que para ser lo mas fresco posible son empacados mientras aún se mueven (7), que estás en la nación americana pero la propaganda de especiales puede estár impresa en indú, español, inglés o chino (8).  En ese pequeño tramo entre Tribecca y Time Square encuentras una variedad exagerada de comidas típicas de cada rincón del mundo así como una rica mezcla de culturas que te transportan a cualquier parte del mundo antes de que puedas darte cuenta.  A tu lado escuchas a alguien hablando en árabe mientras otros se saludan en español y más adelante escuchas la mezcla de italiano, ruso, francés, portugués e inglés que se funden confundiéndose.  Esto, sin contar que las plazas públicas son el mejor lugar para encontrar artistas (9, 10, 11, 12) y las calles están repletas de maravillas por ser descubiertas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Tengo una gran pasión por las artes, así es que New York ha sido para mí como descubrir una inmensa Galería que va cambiando sus exposiciones cada vez que sale y se pone el sol.  Para mí es un lugar mágico.

En ese mágico lugar donde tantas cosas eran nuevas me dí a la tarea de asegurarme de encontrar jaboneros, artistas y artesanos que comparten mi pasión por este aromático mundo, y adivinen ¿que?  ¡Por supuesto que los encontré!  Allí las tiendas que venden productos para el cuidado corporal y aromaterapia no podían faltar, mi favorita fue la hermosa tienda de productos Sabon (13, 14).  Si te digo la verdad, lo que me fascinó de Sabon fue su apariencia antigua pero con un toque moderno y de tan buen gusto (por poco me pierdo de las otras maravillas de NYC por estár allí parada mirando aquellas bellezas) (15 – foto tomada de su página de internet).  En Sabon confeccionan todo tipo de producto para el cuidado corporal y solo en NYC tienen alrededor de 10 tiendas, esas sin contar la de época navideña que abren en el hermoso Bryant Park de Times Square (16- foto tomada de su página de internet).  ¿Te imaginas? ¡¡¡10 tiendas de productos para el cuidado corporal en menos de 5 millas!!!  Absurdo, ¿no?, pues te cuento que visité al menos 5 de ellas y todas y cada una estaba repleta de personas comprando cuando estuve por allí.

 

 

 

 

 

Continué mi ruta por aquellas espectaculares calles y me encontré con la creativa y pintoresca tienda Lush (17, 18) donde todos los empaques son llamativos, coloridos y algo extravagantes. En esta tienda todas sus empleadas se desviven por atenderte y mostrarte la magia de sus bombas de baño que son como las limonadas del Chavo del 8 (¿recuerdas? son de tamarindo, parecen de limón y saben a jamaica…), las ves azules, al tocar el agua se tornan verdes huelen a camomila y sorpresa…¡tienen estrellitas dentro! (o algo por el estilo).  Los jabones son enormes barras, algunas de ellas cortadas en piezas al momento en que la pides y su precio es determinado luego de pesarlo y saber cuantas onzas contiene.  Allí puedes ver piezas TAN diferentes y se venden una detrás de la otra, ¡la fila para comprar es interminable!

 

 

 

 

Entre aquel montón de tienditas hermosas del extraordinario Bryant Park (16) encontré las hermosas rocas de Soap Rocks.  Es imposible que no te gusten estas piezas, ¡es que están tan bien hechas!.  Las combinaciones son perfectas, los aromas exquisitos, los colores tan realistas (19 – foto tomada de su página de internet).  Estas son verdaderas joyas.  Las descubrí por casualidad, Arnaldo colecciona piedras semi preciosas y cuando ví de lejos aquellas rocas salí corriendo para ver que encontraba para añadir a la colección, imaginen mi sorpresa cuando al entrar a la tienda los aromas me acariciaron y los brillos de las micas me deslumbraron.  Definitivamente estas son, si no las mejores, una de las piezas más espectaculares que he visto.

 

Como si no fuera suficiente estuve a punto de enjabonarme la boca pues las frutas en jabón de Scent in a Basket eran casi imposibles de resistir.  He visto muchas piezas de jabón, creativas por demás, pero nunca, jamás vi unas frutas que lucieran tan reales (20 – foto tomada de su página de facebook).  Lamentablemente no pude probarlas (o sea…bañarme con ellas) pues cuando las descubrí ya el mercado estaba cerrado y al próximo día acababan mis vacaciones, Puerto Rico me esperaba y no me daba tiempo de regresar, pero no pierdo la esperanza de darme un gustazo con ellas en cuanto tenga la oportunidad.  Los olores que emanaban de aquellas canastas me hacen aún soñar con ellos.

 

 

No cabe duda de que existe TANTA creatividad como personas en el mundo.  Las piezas de jabón pueden lucir como quieras que luzcan:  rocas, frutas, postres, paisajes, cuadros, entre infinidades de otras cosas, sólo falta que eches a volar tu imaginación y te aseguro que ellas podrán ser tan especiales y únicas como tú.  ¿Quién sabe?, quizás algún día me encuentre con una de tus piezas en esta u otra maravillosa gran ciudad.  ¡Sueña en grande!